Berenjenas fritas

La verdad es que hacer berenjenas fritas es la mar de fácil. Sólo tienes que seguir unos sencillos pasos, porque lo más importante para conseguir que estén perfectas es quitarles un poco del exceso de amargor que tienen. Hazlas y disfruta de esta magnífica verdura.
Lo primero que tenemos que hacer es cortar las berenjenas en rodajas no muy finas y ponerlas en un plato con leche durante un rato
Escurrir las berenjenas, salpimentarlas y pasarlas por harina y huevo.
Poner una sartén con abundante aceite de oliva y freírlas.
Dejarlas en un plato con un papel absorbente que recoja la cantidad de aceite sobrante.
Se sirven para acompañar otros platos, especialmente carnes de todo tipo. Aunque también puedes ponerlas como aperitivo o entrante antes de cualquier comida. Son una auténtica delicia.

Una alternativa para que las berenjenas fritas queden crujientes y claras, es ponerlas una vez cortadas, en un cuenco con gaseosa (en vez de la leche) durante 30 minutos. Entonces se escurren, se pasan por harina y se fríen en abundante aceite.