Calcots al horno

Los calcots al horno los aprendí a hacer cuando estuve viviendo en Barcelona porque allí los comía un montón y llegó un punto en el que mis amigos no querían hacérmelos, así que tuve que aprender.
Tenemos que limpiar bien los calcots quitándoles un trozo de los rabitos y la primera capa superior de la piel. Una vez lisos, los pasamos por un chorro de agua fría, los secamos con papel absorbente y los colocamos en la bandeja del horno forrada con papel de aluminio y regados con un poquito de aceite de oliva.
Una vez listos los calcots, los metemos en el horno, precalentado a 250º, y los dejamos dentro durante unos 40 minutos aproximadamente. Cuando estén doraditos por fuera y tiernos por dentro, estarán listos.