Canapés de calabacín y foie

A veces lo mejor de una comida o cena de celebración... son los entrantes y los aperitivos. Sobre todo, si son tan originales como estos canapés de calabacín y foie. ¡Conseguirás sorprender a todos tus invitados!

Paso 1:

Tuesta el pan de molde normalmente en una tostadora... igual que si fueras a preparar unas tostadas para el desayuno. Si quieres, o si no tuvieras tostadora, también puedes tostar el pan en una sartén o en una plancha... pero en este caso, no olvides poner una pizquita de mantequilla sobre cada rebanada de pan de molde. Vas a emplear una rebanada por cada dos canapés de calabacín y foie que vayas a preparar. Una vez que el pan esté tostado, córtalo en forma circular con la ayuda de un aro de emplatar... lo normal es que obtengas dos círculos de pan por cada rebanada. Reserva sobre una rejilla para que no se ablanden por efecto del calor.

Paso 2:

Lava los calabacines y, con la ayuda de un pelador, retira parte de su cáscara de forma longitudinal... pero sin pelarlo completamente. Se trata de quitar tiras de su piel dejando de forma alterna el calabacín pelado y con piel. Hecho esto, parte los calabacines en rodajas gordas... como de 1,5 centímetros más o menos.

Paso 3:

Acerca un cazo al fuego con abundante agua y el azúcar. Mantén el cazo tapado para que alcance el punto de ebullición y antes (éste es un excelente truco para ahorrar energía). Una vez que el agua rompa a hervir introduce las rodajas de calabacín y escáldalas. Escaldar es una técnica de cocina, un tipo de cocción muy breve que consiste en introducir un alimento en agua hirviendo durante apenas unos segundos. Pasados 15 o 20 segundos... saca el calabacín y pásalo a un bol con agua fría y hielo para cortar la cocción. Una vez hecho esto, déjalos escurrir sobre un paño de cocina limpio.

Paso 4:

Por otro lado, acerca un cazo al fuego con el vino de oporto y lleva a ebullición. Pasados unos minutos, cuando se haya evaporado el alcohol, incorpora la nata líquida y dale un hervor al conjunto durante unos minutos, hasta que espese. Añade un poco de sal y pimienta negra recién molida.

Paso 5:

Cuando la mezcla de nata y vino haya espesado un poco, retira del fuego y añade el foie. Mueve bien con la ayuda de una cuchara o de unas varillas... lo que tienes que conseguir es que se mezcle todo bien y obtener una crema homogénea.

Cuando ya tengas la mezcla con la textura adecuada, ponla en una manga pastera y deja reposar un rato hasta que se enfríe un poco.

Presentación:

Sobre cada rebanada de pan, coloca una rodaja de calabacín y encima, un poco de la crema de foie... empela una boquilla estriada para dar una forma bonita y atractiva a la crema de foie. Termina con un poco de cebollino bien picadito. Si no tuvieras cebollino... también puedes terminar estos canapés de calabacín y foie con una pizca de pimienta rosa bien machacadita. ¡Fantásticos canapés!

Consejo:

El calabacín es un alimento con mucha agua... y aunque lo hayas dejado escurrir sobre un paño de cocina o un papel absorbente después de escaldarlo... corres el riesgo de que el pan tostado se humedezca si preparas estos canapés de calabacín y foie con antelación. De modo que, aunque tengas todos los elementos listos por adelantado, reserva por separado y monta en el último momento.

Sugerencia:

No dudes en elaborar estos canapés de calabacín y foie con el bloc de foie gras de pato de la marca DIA. Se presenta en una cómoda lata de 200 gramos y tiene todo el sabor, aroma y textura del mejor foie gras. ¡Pruébalo!

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