Hacer una compota de frutas es muy sencillo y, además, es una de las cosas más ricas que se pueden servir como postre o tomar como merienda. Yo os dejo aquí mi forma de hacerla, que no es solo cocer las frutas, y espero que os guste mucho y os sirve en cualquier momento.
Se coloca una cacerola en el fuego y se echa en ella el vino, el azúcar y la rama de canela. Se le da unas vueltas y se deja cocer hasta que se disuelva el azúcar. Entonces, se echan los orejones a la cacerola y se dejan cocer unos 10 minutos aproximadamente.
Pasados los 10 minutos, se echan las ciruelas y pasas de uva, y se dejan otros 10 minutos. Entonces, se añaden las manzanas en trozos y, pasados 5 minutos, las peras y las almendras picadas. Se dejan todas las frutas 5 minutos más al fuego con la cazuela tapada y se remueven bien para que se deshagan y se forme la compota.