Dulce de leche con zumo de limón

El dulce de leche casero nos soluciona, por ejemplo, el relleno de un dulce o un poco de helado de vainilla acompañado. Es decir, puede ser parte de otro postre y quedará todo casero e verdad.
Exprimimos el zumo de los limones y lo mezclamos con la leche. Dejamos reposar sobre una hora hasta que la leche se corte.
Ponemos una cacerola en el fuego y añadimos la mezcla de zumo y leche. Cuando empiecen a aparecer grumos, echamos el azúcar, la canela y la cáscara de limón. Lo mezclamos bien para que todos los sabores se mezclen y lo dejamos cociendo a fuego medio. Cuando empiece a hervir lo removemos de vez en cuando hasta que se evapore el líquido.
Bajamos un poco el fuego y seguimos removiendo bien hasta que quede seco. Entonces, añadimos el ron y removemos bien hasta que se evapore el alcohol. Seguimos removiendo hasta que el dulce de leche coja el color habitual y lo retiramos del fuego a un cuenco para dejarlo enfriar.
No es difícil, pero es sacrificado. Aun así, pruébalo, ¡valdrá la pena seguro!