Frutas de estación escarchadas

Cuando iba a los restaurantes de pequeña siempre me pedía esos helados que venían dentro de las frutas, porque me hacían mucha gracia. Ahora los preparo para mis hijos, o para alguna ocasión, ya que estas frutas de estación escarchadas resultan muy originales a la par que sabrosas. En primer lugar preparamos la fruta, que hará las veces de envase para la crema de fruta. Lavamos bien la fruta con agua limpia y cortamos un poco de la parte inferior para que se mantenga en equilibrio y la tapa superior. Esta última no la eliminamos. Extraemos la pulpa con una cuchara. El continente vacio de la fruta lo reservamos en el congelador. Ahora preparamos la crema del relleno de la fruta. Ponemos la pulpa en un bol y la procesamos. Para que la crema nos quede mucho más suave, pasamos por un chino la pulpa triturada. Le agregamos ahora la nata y la leche condensada. Lo procesamos todo a velocidad alta. En un cuenco vertemos la preparación anterior y la cubrimos con papel film. La llevamos al congelador, y cada unos 20 minutos, lo batimos con un cuchara o unas varillas hasta que obtengamos consistencia de escarchado. No lo debemos dejar que se cuaje sin moverlo, ya que si no se solidificaría y ya no tendrá la textura que queremos. Sacamos del congelado la cascara de la fruta vacía, y la rellenamos con la crema dulce hecha con su pulpa. Volvemos a cerrarla con la tapa y guardamos en el congelador hasta el momento en que vayamos a consumirlo. En este caso yo he hecho un limón, pero tú lo puedes hacer con cualquier otra clase de frutas, en especial los cítricos ya que son de los que mejor podemos aprovechar la piel, ya que es dura.