Para realizar un buena tarta de chocolate, entre otras cosas, necesitamos realizar un buen ganache de chocolate. Para ello tenemos que picar el chocolate en trocitos muy pequeños o en juliana (ponemos el chocolate en una superficie plana y con un cuchillo intentamos hacer tiras finas aunque se nos desmoronarán, pero pasa nada porque ese es el efecto que queremos conseguir) para que sea más fácil fundirlo y lo reservamos en un bol grande.
A continuación, ponemos un cazo al fuego y le añadimos la nata líquida y cuando veamos que está suficientemente caliente, justo antes de que empiece a hervir, apagamos y retiramos la nata del fuego.
Después, echamos muy despacio la nata caliente al bol donde teníamos el chocolate y con un batidor manual (varillas), batiremos enérgicamente hasta que se disuelva totalmente el chocolate. También podemos verter la nata poco a poco sobre el chocolate e ir batiendo. De esta manera nos será más fácil y conseguiremos que nuestra mezcla de chocolate quede homogénea.
A la mezcla anterior (chocolate y nata), le añadiremos la mantequilla a temperatura ambiente y seguiremos batiendo rápidamente hasta que la mantequilla quede completamente integrada.
Ya está listo nuestro ganache de chocolate.
CONSEJOS:
-Si el ganache lo vamos a utilizar para cubrir una tarta, hay que utilizarlo caliente. Pero si lo queremos utilizar como relleno hay que dejarlo enfriar en la nevera, al menos 24 horas, y después con ayuda de una varillas batir hasta que consigamos montar la mezcla.
-Nuestro ganache, una vez que esté listo, tendrá una duración aproximada de dos semanas en el frigorífico. También se podrá congelar y volverlo a descongelar a temperatura ambiente y calentarlo a muy baja temperatura y en intervalos de 30 segundos en el microondas.