Gazpacho andaluz

El gazpacho andaluz es, como su propio nombre indica, una receta originaria de Andalucía. Es un plato perfecto para el verano por su alto poder hidratante, no solo por su alto contenido en agua, sino por los nutrientes y minerales que aportan las verduras: sodio, potasio, magnesio. Este verano que no falte gazpacho en tu nevera. Fácil y rápido de preparar este gazpacho andaluz será el mejor calmante para la sed en un caluroso día de verano. 

Paso 1:

Lo primero que debes hacer es pelar y quitar las pepitas a los tomates. Esto puedes hacerlo con un pelador bien afilado o escaldar los tomates en agua hirviendo durante unos 30 segundos y pasarlos a un bol con hielo y agua para que se enfríen. Así se pelarán con mucha facilidad. 

Paso 2:

Corta los tomates en cuartos y, con la ayuda de un cuchillo, retira las pepitas. Échalos en una batidora de vaso o en un recipiente donde vayas a triturar todo el conjunto de las verduras. 

Paso 3:  

Pica la cebolla morada finamente y reserva. Corta el pimiento y reserva un cuarto bien picadito junto con la ceboolla morada. Pica también el pimiento amarillo y reserva. Esta será la guarnición que decorará tu gazpacho andaluz.

Paso 4:

Añade a la batidor a de vaso el ajo pelado, la cebolla cortada en cuartos, el pimiento verde restante cortado en tiras, el pepino pelado y sin semillas, la sal y el aceite de oliva virgen extra y el vinagre. Tritura todas las verduras y añade el agua y el hielo. Vuelve a triturar hasta conseguir una mezcla homogénea. 

Paso 5: 

Una vez tengas tu gazpacho andaluz bien triturado mételo en la nevera y déjalo reposar al menos un par de horas. Si pasa toda la noche mucho mejor. Así los sabores se intesificarán y quedará un gazpacho perfecto. 

Presentación:

Cuando sea el momemento de servir el gazpacho andaluz, acompáñalo de la guarnición qu ehas preparado de pimiento verde, amarillo y cebolla morada. Le dará un color y unas notas frescas deliciosas. 

Sugerencia:

Gazpachos hay muchos por lo que si quieres para darle espesor puedes añadir un poco de miga de pan blanco y tendrá más consistencia. También puedes añadirle en el momento de servicio unos trocitos de pan tostado o croutons que además le darán un toque crujiente que le va de maravilla. 

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