Hamburguesa negra pulled pork

Hay recetas que son rápidas, resultonas y muy adecuadas para salir del paso, pero esta no es una de ellas. La hamburguesa negra pulled pork es un plato que requiere planificación, tiempo y cierto trabajo, pero los resultados merecen la pena. Un pan negro como ala de cuervo, una carne sabrosa que se deshace en la boca, una salsa suculenta y adictiva… en definitiva, una hamburguesa que dejará a todos boquiabiertos tanto por su espectacular sabor como por su seductora apariencia.

Paso 1:

En primer lugar hay que preparar los panecillos. Pon la leche al fuego y añade la tinta de calamar. Mezcla bien con unas varillas y cocina unos minutos sin que llegue a hervir. Retira entonces del fuego.

Paso 2:

Cuando la leche haya perdido la suficiente temperatura como para estar simplemente tibia, añade la levadura fresca (si es seca de panadería, reduce la cantidad a la mitad), la mantequilla en pomada, el huevo, el azúcar y la sal. Integra y disuelve todo muy bien con ayuda de las varillas.

Paso 3:

Tamiza la harina sobre una superficie del trabajo y abre un hueco en el centro del montículo. Vierte los ingredientes líquidos en él y empieza a incorporar la harina lentamente, amasando con los dedos. Cuando obtengas una bola compacta, sigue amasando enérgicamente durante diez minutos. Después, deja reposar la masa en un recipiente cubierto con un paño limpio hasta que doble su tamaño, aproximadamente 90 minutos.

Paso 4:

Cuando transcurra ese periodo, amasa de nuevo durante otros 10 minutos, separa la masa en el número de panecillos que desees y deja levar hasta que vuelvan a doblar su volumen, aproximadamente una hora.

Paso 5:

Cuando hayan alcanzado el tamaño adecuado, precalienta el horno a 200°C. Cubre la parte superior de los panecillos con sésamo negro, pulverízalos con agua y mételos al horno durante 12 minutos aproximadamente. Cuando estén hechos, sácalos del horno y déjalos enfriar completamente sobre una rejilla.

Paso 6:

Pela los ajos y májalos en un mortero hasta que queden reducidos a pulpa. Pela la cebolla y córtala en daditos diminutos. Mézclalos junto a la salsa de soja, la mostaza, el comino, el pimentón, el azúcar moreno, sal y pimienta. Unta la carne con la mezcla frotando bien. Déjala reposar en la nevera con el resto de la marinada durante 2 horas.

Paso 7:

Precalienta el horno a 130°C. Pon la carne en un recipiente adecuado para horno en el que quepa con estrecheces, vierte encima la marinada, aceite de oliva y un poco de agua y mételo al horno durante 7 horas aproximadamente (empieza a vigilar la carne a las 6 horas y sácala cuando esté hecha y se pueda desmenuzar fácilmente con un tenedor). Rómpela en hebras.

Paso 8:

Vierte los jugos del recipiente de horno en un cazo, añade salsa barbacoa y pon a fuego medio hasta que reduzca. Obtendrás una salsa barbacoa enriquecida y mucho más sabrosa.

Paso 9:

Corta los panecillos por la mitad y tuéstalos un par de minutos bajo el grill del horno.

Presentación:

Rellena los panecillos con pulled pork, una loncha de queso y remolacha encurtida al gusto. Sazona con salsa barbacoa. Después de tanto trabajo… ¡ya tienes tu hamburguesa negra pulled pork!

Sugerencia:

Para el toquecito agridulce que le da originalidad y personalidad a tu hamburguesa negra pulled pork, hazte con un bote de remolacha encurtida DIA. ¡Deliciosa!

En Demos la vuelta al día: 5 claves para una hamburguesa 10

En Demos la vuelta al día: Objetivo: patatas fritas crujientes y doradas

En Demos la vuelta al día: We love patatas fritas