Jamón asado con piña

Una de las mejores guarniciones que podemos poner para la carne, es la fruta. Yo la prefiero a las verduras, por mucho que me encante un buen puré de patatas. Por eso este jamón asado con piña se ha ido convirtiendo, poco a poco, en uno de mis platos preferidos. La carne queda muy jugosa tras estar varias horas macerando en el jugo de piña y miel, dándole unos sabores entre dulces y ácidos espectaculares. Lo primero que vamos a hacer es atar bien el jamón con hilo de bramante para que mantenga una buena forma. Por otro lado, en una olla grande, ponemos las verduras troceadas junto con el vino, una tira larga de corteza de limón, una cucharadita de sal, y por ultimo lo vamos a cubrir con agua y lo coceremos todo junto durante una hora y media. Pasado ese tiempo lo escurrimos bien. Ahora colocaremos el trozo de jamón en una fuente de horno. Mientras, en un cuenco, mezclaremos el jugo de la piña con el zumo de limón y la miel. Colocamos el jamón en un cuenco grande o ensaladera y bañar con el líquido. Lo mejor es dejar macerando todo durante dos horas, bañando de vez en cuando el jamón. Poner el jamón en una fuente con la salsa y hornear a temperatura fuerte durante una hora más, bañándolo con el caldo cada cierto tiempo. Cuando se vea que la carne ya está hecha, lo vamos a desatar y servir con la salsa y los trozos de piña, puestos a un lado. Lo bueno de este jamón asado con piña es que esta buenísimo tanto si se sirve frio como caliente.