Una idea sencilla y original para añadir un toque diferente y con cierta distinción. Puede servir de aperitivo en una comida más formal, o como un plato más de picoteo en una reunión de amigos o cena informal: mantequillas de pistacho, avellanas y anacardos. Lo mejor de todo es que puedes prepararlas por adelantado. En el momento, solo tendrás que tostar un poco de pan.
Para la mantequilla de pistachos
Paso 1:
Saca de la nevera la mantequilla un rato antes de trabajar con ella para que se ablande. Es importante que a la hora de elaborar estas mantequillas de pistacho, avellanas y anacardos, la mantequilla esté en pomada... con esta expresión nos referimos a ese punto en el que la mantequilla está muy blandita y se puede trabajar con ella fácilmente, pero sin que llegue a estar derretida.
Paso 2:
Mientras la mantequilla se ablanda, ve pelando los pistachos. En la medida de lo posible intenta retira también la pielecilla que los recubre para dejar el pistacho verde, lo más desnudo posible. Así, tu mantequilla de pistacho será mucho más agradable.
Paso 3:
Cuando ya esté en pomada, coloca la mantequilla en un bol y bátela hasta que tenga una consistencia espumosa.
Paso 4:
Tritura en la batidora o en la picadora los pistachos... pero sin llegar a reducirlso a polvo... si quedan algunos trocitos pequeños, mucho mejor, así será más agradable esta mantequilla en la boca. Para ayudarte a triturar, añade en la batidora el vino dulce.
Paso 5:
Mezcla la mantequilla con los pistachos y mezcla todo bien. Sazona con sal y pimienta negra recién molida.
Para la mantequilla de anacardos
Paso 1:
Al igual que en el caso... debemos partir de una mantequilla en pomada. Cuando ya la tengas lo suficientemente blandita como para trabajar con ella, colócala en bol y bátela hasta obtener una mezcla espumosa.
Paso 2:
Tritura los anacardos con ayuda de la leche de coco.
Paso 3:
Mezcla la mantequilla con la pasta de anacardos y leche de coco. Añade el coco rallado y pon a punto de sal y pimienta blanca. Mezcla todo bien.
Paso 4:
Coloca en un tarro bonito y mételo en la nevera un buen rato.
Para la mantequilla de avellanas
Paso 1:
Coloca la mantequilla en pomada en un bol y trabájala con unas varillas hasta obtener una mezcla espumosa.
Paso 2:
Tritura las avellanas en el mortero de tal forma que obtengas trocitos pequeños... pero no una pasta de avellanas... así será más agradable encontrarte después trocitos en la boca.
Paso 3:
Coloca el chocolate en trocitos pequeños en un bol y mete en el microondas a media potencia durante 20 segundos. Sácalo, muévelo y vuelve a meterlo otros 20 segundos. Repite la operación hasta que la mantequilla esté completamente derretida. Deja enfriar un rato.
Paso 4:
Cuando el chocolate ya no esté caliente, mezcla con las avellanas y, a su vez, añade esta mezcla a la mantequilla. Mezcla todo bien y sazona con una pizca de sal y de pimienta rosa.
Paso 5:
Coloca tu mantequilla de avellanas en un frasco igual a los anteriores... y a la nevera para que coja cuerpo y textura.
Presentación:
Sirve tus mantequillas de pistacho, avellanas y anacardos en sus correspondientes frascos o tarros. Una forma muy bonita de presentarlas es con un cordel atado a cada uno de los frascos. En una bandeja, coloca estas mantequillas, cada una con un cuchillo para untar y unos panes tostados... y tendrás una idea fantástica para una merienda entre amigos, con más cosas para picotear.
Sugerencia:
No dudes en emplear la mantequilla marca DIA a la hora de elaborar estas mantequillas de pistacho, avellanas y anacardos. Siempre y cuando no quieras hacer casero todo el proceso. En ese caso, es muy sencillo, parte de la nata para cocinar DIA y bátela enérgicamente hasta separar el suero de la mantequilla. Así de fácil... aunque un poco trabajoso.