Musaka

La musaka es, casi con seguridad, la receta griega más conocida en todo el mundo. Sin embargo, su origen hay que situarlo no en Grecia sino en los Balcanes y Oriente Medio, donde este delicioso plato se sigue preparando, pero con carne de cordero, en lugar de ternera. Nosotros la preparamos con ternera… como si fuera una lasaña con carne, berenjena y patatas.

Paso 1:

Pela y pica menudo el ajo, la cebolla y la cebolleta.

Paso 2:

Acerca al fuego con un poco de aceite de oliva una olla o cacerola de fondo grueso y sofríe, a fuego suave, estas verduras hasta que estén transparentes. Salpimentar.

Paso 3:

Añade la carne picada y condimenta con el comino, sal y pimienta. Cocina durante unos minutos para que se haga un poco la carne y se tueste el comino. Añade después el pimentón, el vino y el tomate. Cocina unos minutos a fuego medio e incorpora después el caldo de pollo. Continua la cocción a fuego bajo durante una hora aproximadamente, o hasta que el líquido reduzca y la carne y esté tierna. Retira del fuego y reserva.

Paso 4:

Mientras se va haciendo la carne, parte en rodajas de medio centímetro aproximadamente las berenjenas, colócalas en l bandeja de horno con un poco de aceite de oliva y sal por encima, y ásalas durante 20 minutos aproximadamente a 220°.

Paso 5:

Pela las patatas y córtalas en rodajas finas. Unta con aceite de oliva una fuente de horno de paredes altas. Coloca una capa de patatas , salpimenta y condimenta con perejil y menta picados. Por encima, pon una capa de las berenjenas asadas, y por encima, una capa de la carne. Repite la operación con más capas, en el mismo orden.

Paso 6:

Mezcla la salsa bechamel con los huevos, las yemas, la sal, la nuez moscada y la pimienta y extiéndela sobre la última capa de tu musaka. Métela en el horno, que seguirá caliente, durante 30 minutos a 190° para que los vegetales se hagan bien, y solo al final, enciende el grill, para que la superficie se dore. Deja reposar unos minutitos antes de servir.

Presentación:

Sirve tu musaka bien calentita… partida en pequeñas porciones porque es un plato contundente… aunque está tan rica, que ¡repetirás seguro! Buen provecho.

¿Una musaka más ligera?

Si quieres guardar la línea… pero sin renunciar a platos tan deliciosos como éste, solo tienes que cambiar algún proceso e ingrediente. En este caso, cuece la patata y después lamínala. Haz todo lo demás igual, monta tu musaka pero elimina la bechamel enriquecida con huevos. Sencillamente, termina tu musaka espolvoreando un poco de algún queso bajo en calorías rallado y métela en el horno. Como todos lo ingredientes están ya cocidos, tan solo necesitarás unos minutos de horno para que se tueste el queso.

Sugerencia: 

Prueba esta musaka con algún vino tinto fresco. En tu tienda DIA más cercana puedes encontrar una amplia selección de vinos seleccionada por reconocidos sumilleres. 

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