Patatas bravas - receta de usuario

¡Parece mentira que las patatas bravas las comamos únicamente en los bares con lo ricas que están! Yo me decidí a hacerlas en mi casa en los días que había fútbol, que solían venir amigos a verlo, y esta receta es muy cómoda tanto para hacerla como para servirla, porque pones unos palillos y te quitas de fregar.
Hervir las patatas con piel en una cacerola con agua y sal al gusto, durante unos minutos a fuego fuerte. Una vez estén blanditas, secarlas bien en paños limpios y pelarlas y cortarlas en dados irregulares. (Este paso se hace para que las patatas queden más tiernas, pero no es necesario si no tienes tiempo o te parece que quedan mejor friéndolas directamente).
Freír las patatas en aceite de oliva bien caliente hasta que se doren al gusto.
Para preparar la salsa de tomate picante, mezcla la salsa de tomate con la guindilla, un poco de tabasco, el aceite de oliva, el vinagre, la sal y la pimienta negra. Ponlo en una cacerola en el fuego y deja que de un hervor todo mezclado.
Las patatas bravas varían mucho dependiendo del grado de picante de la salsa y la forma de hacer las patatas, simplemente hay que encontrar la forma que más guste.