Una receta fácil y además, muy rica. Estas patatas son un delicioso acompañamiento para carnes o, por ejemplo, un pollo asado.
Paso 1:
Lava las patatas con piel y ásalas en el horno a 200° envueltas en papel de plata hasta que estén tiernas durante, aproximadamente, unos 45 minutos.
Paso 2:
Pela y pica menudos la cebolla y los dientes de ajo, así como el pimiento rojo lavado.
Paso 3:
Acerca una sartén al fuego y saltea el bacón en taquitos. En otra sartén con un chorrito de aceite, saltea las verduras. Pasados cinco minutos, escurre el bacón del aceite que habrán soltado y añádelo a las verduras.
Paso 4:
Cuando las patatas estén hechas sácalas del horno. Corta un poquito los lados para que se mantengan de pie y después córtalas a la mitad. Vacíalas con la ayuda de una cuchara (más o menos la mitad de la ptata) y mezcla la pulpa con el bacón, las verduras, la nata y el queso crema. Mete la mezcla en una manga pastelera y rellena las patatas.
Paso 5:
Espolvorea un poco de queso rallado por encima y mete en el horno de nuevo en el modo gratinado hasta que cojan color.
Presentación:
Sirve tus patatas recién hechas… con unas hojitas de perejil como adorno y… ¡no dejes que se enfríen!