Pechugas a la Kiev
La primera vez que probé estas pechugas a la Kiev me resultaron deliciosas, tanto es así que no pare hasta que di con la receta perfecta para hacerlas yo en casa. Esta receta la conseguí gracias a una amiga, y la verdad es que quedan absolutamente deliciosas. ¿Lo mejor? Cuando partes la pechuga y sale de su interior ese maravilloso relleno de mantequilla.
Lo primero que tenemos que hacer es coger las pechugas y abrirlas por la mitad con un cuchillo para rellenarlas con mantequilla y perejil picado.
Cerrarlas bien con la ayuda de palillos y después se pasan por harina y una masita hecha con una taza de leche, 1 huevo 1 cucharada de harina con un poco de sal.
Las volvemos a pasar otra vez por harina con sal y pimienta y luego las freímos en mantequilla con un poco de aceite hasta que queden doraditas y suavecitas.
Cuando estén se sacan las pechugas, y se ponen sobre un poco de pape de cocina para que absorba todo el exceso de grasa.
Puedes acompañar las pechugas a la Kiev con un poco de ensalada y unas patatas fritas, que siempre resultan un acompañamiento perfecto.
Yo no las suelo preparar con salsa, pero si tú lo prefieres puedes hacer una echando en la grasa que le queda en la sartén tras hacer las pechugas unos hongos junto con un poco de crema agria, unas cebollitas de rabo picadas, y todo regado con un poco de vino blanco. Lo dejas hervir durante unos minutos y lista.
