Una golosina muy divertida, pero nada pesada. Si te apetece tomar algo dulce, y guardar la línea al mismo tiempo, estas piruletas son para ti.
Paso 1:
Corta las tortas de arroz en 4 cuadrados.
Paso 2:
Corta el chocolate en trozos medianos con un cuchillo, ponlo en un bol y mételo en el microondas a media potencia durante 30 segundos. Pasado ese tiempo sácalo, remuévelo bien con una espátula y, si aún no está bien derretido, vuelve a meterlo, esta vez 20 segundos. Realiza esta operación cuantas veces sea necesario, pero es importante que lo hagas poco a poco y siempre removiendo. Así evitarás que el chocolate se queme o que se endurezca por encima.
Paso 3:
Pincha los trozos de torta de arroz en los palos y báñalos en el chocolate, pero sólo hasta la mitad, y déjalos enfriar a temperatura ambiente.
Presentación:
Puedes servir tus piruletas recogidas todas en un vasito pequeño… o bien intentar clavarlas sobre una tosta de arroz entera… ¡sorprendente!