Pollo en salsa de zanahorias

Para los que les encante la carne de pollo pero se les hayan terminado las ideas de cómo prepararlo, esta receta de pollo con salsa de zanahorias es perfecta. A mí me encanta y a todos a los que se la he preparado les ha pasado lo mismo. Tan solo es cuestión de seguir unos sencillos pasos.

Ponemos el pollo en un bol y lo sazonamos a nuestro gusto. Cogemos una sartén, echamos un chorrito de aceite en ella y la ponemos a calentar en el fuego. Echamos el pollo cuando el aceite está ya listo, y lo doramos bien, ya que el pollo crudo no es comestible.
Una vez hemos hecho el pollo y lo hemos retirado, usamos la misma sartén para hacer la salsa, y es que esos jugos que ha soltado mientras su cocción están muy buenos. Ponemos aceite a calentar y echamos la zanahoria en rodajas finas, el puerro en trocitos el diente de ajo picadito, al igual que la cebolla, y lo rehogamos todo bien hasta que se poche. No olvidemos sazonarlo a nuestro gusto.
Echamos ahora la pulpa del pimiento y el vino blanco. Removemos bien y dejamos que el alcohol se evapore. Entonces, echamos el pollo a la sartén y lo rehogamos con toda la salsa para que coja buen sabor. Si vemos que la salsa está muy espesa, echamos un poco de agua.
Un cuarto de hora después, sacamos el pollo de la sartén y trituramos la salsa con ayuda de una batidora. Si queremos que tenga una textura más fina, la pasaremos por el chino.
Volvemos a echar el pollo junto a la salsa y le damos a todo un último hervor.
Este pollo con salsa de zanahorias es perfecto.