Puerros con salsa romesco (cuando el calçot no esta a nuestro alcance).

Si quereis preparar una calçotada, pero los calçots no están a vuestro alcance, podeis optar por sustituirlos por unos puerros finos. Además no os preocupeis si no teneis donde realizar un fuego con brasas para cocinarlos (como suelen prepararse los calçots), ya que esta receta la podreis realizar en casa sin problema ya que usaremos el horno para preparar los puerros.

Paso 1: 

Ponemos en remojo las ñoras desde la noche anterior. Una vez bien remojadas, les sacamos las pepitas y las reservamos.

Paso 2:

Precalentamos el horno a 200º.

Cortamos los puerros por la mitad y envolvemos cada mitad en papel de aluminio. Envolvemos de forma individual en papel de aluminio los tomates (uno a uno) y la cabeza de ajos. Colocamos sobre una bandeja de horno y la metemos al horno (meteremos una rebanada de pan simultaneamente en una rejilla hasta que se tueste, si no disponemos de pan tostado).

Los tomates estarán listos en unos 15-20 minutos, mientras que los ajos estarán listos un poco antes. 

Paso 3:

Tras sacar del horno los ajos y los tomates, pelamos uno a uno cada diente de ajo, y pelamos y despipamos los tomates.

Paso 4:

Introducimos en un vaso de batidora el tomate, los ajos, las ñoras, el aceite, el vinagre y el pan tostado. Batimos. Añadimos finalmente una cucharadita de pimentón rojo dulce y una punta de guindilla. Batimos de nuevo para finalizar la salsa romesco (rectificamos de sal si es preciso).

Paso 5:

Sacamos los puerros tras 1 hora de horno, los desenvolvemos del papel de aluminio y ponemos en una fuente. Colocaremos la salsa en un recipiente lo suficientemente grande como para poder ir mojando los puerros justo antes de degustarlos.