Rosquillas

Pocas palabras son tan internacionales y tan entendidas en cualquier idioma... Esa rosquilla por la que suspira Homer Simpson es, sencillamente, irresistible. Prueba a preparar en casa estas rosquillas o berlinas de masa dough en casa y juega con las decoraciones.

Paso 1:

Coloca en un bol la harina y la levadura y mézclalas.

Paso 2:

Agrega la leche, la yema, el huevo y el azúcar. Incorpora las esencias y  la sal. Finalmente, incorpora la mantequilla fundida.

Paso 3:

Mezcla bien todos los ingredientes, primero con la espátula hasta que esté todo integrado, y después ve trabajando la mezcla y amasando enérgicamente, ya con las manos, hasta que la masa no se pegue en los dedos, lo que llevará unos 10 minutos de trabajo. El resultado debe ser una masa lista, suave y flexible. Déjala reposara temperatura ambiente y tapada para que la levadura haga su trabajo y la masa duplique su volumen. Esto llevará aproximadamente unos 40 minutos.

Paso 4:

Cuando la masa ya haya doblado su volumen, estírala hasta lograr una grosor de unos 6 milímetros. Ayúdate con el rodillo. 

Paso 5:

Utiliza un molde cortador de 8 cm de diámetro y otro de 3 cm de diámetro para hacer el agujero central. Se trata de obtener círculos. Si no dispones de un cortador, también puedes hacerlo a mano con un cuchillo, aunque en este caso los donuts te quedarán más irregulares entre ellos. Pero con un poco de paciencia y buen pulso, los puedes hacer perfectamente.

Paso 6:

Retira la masa sobrante (que podrás volver a estirar y cortar de nuevo, hasta que casi hayas terminado con ella). Cuando ya tengas todos tus donuts cortados, deja que reposen de nuevo de 15 a 20 minutos. Dales la vuelta y deja reposar del otro lado durante otros 10 o 15 minutos.

Paso 7:

Fríe tus rosquillas en abundante aceite caliente. Si tienes una freidora, coloca su termostato a 160°, y si los haces en sartén, cuando veas el aceite ya caliente, pero sin que llegue a humear. Ve haciéndolos poco a poco y en varias tandas. Una vez que vayan estando bien doraditos, retíralos a un papel absorbente para retirar el exceso de grasa.

Una vez doradas, retíralos del aceite y apóyalos sobre papel absorbente.

Paso 8:

Las rosquillas están riquísimos tal cual… pero también los puedes bañar con chocolate, o sólo hacer una decoración con hilos de chocolate fundido por encima. También los puedes cubrir con azúcar. Deja volar tu imaginación porque también puedes hacer deliciosas coberturas con fondant o con cualquier otro topping o adorno que se te ocurra.

Presentación:

Sirve tus rosquillas en una bandeja… los puedes tomar para desayunar o para merendar acompañando un vaso de leche o un café, como postre durante una celebración, en un cumpleaños… la verdad, es que cualquier momento es bueno para un bocado tan rico.

El origen:

El origen de las rosquillas o berlinas de masa dough está muy disputado… aunque la versión más probable es la que lo sitúa en Holanda… concretamente en un postre navideño muy típico en los países bajos denominado oliebollen, que literalmente significa ‘bolas de aceite’. Y desde Europa viajó con sus emigrantes en el siglo XVI a Nueva Amsterdam, hoy Nueva York. Bien es verdad que el nombre actual, y su forma de rosca… llegarían mucho más tarde.