Tarta de fresas

Una tarta que me gusta mucho y que me encanta hacer cada vez que hay un cumpleaños o algún acto importante dentro de mi familia, es la tarta de fresas. Es una tarta no muy difícil de elaborar pero que está muy rica y además al llevar fruta fresca, está aun mas buena y la decoración es increíble. Espero que la hagáis y que os guste tanto como me gusta a mí.
Comenzaremos por lavar bien las fresas, reservaremos la mitad para adornar la tarta, y cortaremos el resto en rodajas. A continuación las vamos a poner en un bol, espolvorearlas con el azúcar, removerlas y dejarlas reposar para que se disuelva el azúcar
Seguidamente tenemos que cortar el bizcocho en tres capas horizontales con mucho cuidado y con un cuchillo muy afilado
Calentaremos la leche con vainilla sobre un fuego lento
En un bol, vamos a batir las yemas con el azúcar y la maizena. Si la mezcla resulta muy espesa, se puede añadir un poquito de agua
Cuando la leche está a punto de hervir, la retiraremos del fuego y la vamos a verter sobre la mezcla de yemas y batiremos. Devolveremos al cazo y volveremos a calentar, removiendo todo el rato con una cuchara de madera.
Cuando está espesa, retiraremos del fuego y pasaremos por un colador. Dejaremos enfriar. Una vez esté fría, incorporaremos 150 ml. de nata montada. Removeremos bien
Vamos a untar una capa de bizcocho con la mitad de la crema, pondremos encima la mitad de las fresas y el azúcar y colocaremos la segunda capa de bizcocho encima. Apretaremos un poco y repetiremos el proceso y colocaremos finalmente la tercera capa
Untaremos toda la tarta (arriba y los lados) con nata montada. Colocar las fresas que hemos apartado al principio arriba para adornar y espolvorear todo con un poco de azúcar glasé.
Esta tarta de fresas queda tan tan rica, que no será la primera vez que la elaboréis.

CONSEJOS:
-Versión para adultos: Se puede verter sobre las capas de bizcocho un chorrito de ron negro - u otro licor.