1- Pon a cocer el agua y una vez esté hirviendo echa el arroz y sal al gusto. Transcurridos 15 minutos hirviendo, se echa en un escurridor y se lava con abundante agua fría para eliminar el almidón del arroz para que quede suelto. Una vez lavado se reserva.
2- Se pica el pimiento y se sofríe con el aceite hasta que esté tierno. Se sala al gusto y se reserva
3- Se mezcla el arroz con la mitad del queso, que has de rallar previamente (por un lado) y los pimientos con la otra mitad del queso rallado
4- En un aro de emplatar de 8 cm de diámetro (TRUCO ) se echan tres cucharadas de arroz y se prensan con el dorso de una cuchara, encima de ella otra capa de pimientos que se vuelve a prensar con la cuchara, para terminar con una capa de arroz igual que la primera. Saca el molde. Tienes que preparar cuatro tartaletas (una por comensal)
5- Ralla el queso curado con ayuda de un rallador o mandolina y añádele el queso roquefort desmenuzado.
6- Precalienta el horno a 200 ºC. Sobre papel de horno echa dos cucharadas de la mezcla de quesos y extiéndelo de forma que tenga forma lo más redonda y plana posible. Tienes que preparar cuatro (una por comensal). Deja hornear 10 minutos hasta que veas que se ha dorado el queso. Deja enfriar y después retira las láminas de queso, que has de clavar encima de la tartaleta (una en cada tartaleta)
*TRUCO : Si no tienes aro de emplatar puedes cortar (con ayuda de un cuchillo de sierra) una botella de plástico de 2 litros de cualquier bebida (un refresco, etc) o si prefieres menos cantidad, una botella de 0.5 l de agua. Corta la botella de modo que te quede un cilindro de 6 cm de alto aproximadamente. Corta la parte lisa, la que no tenga ranuras, pues si no, te costará más sacar el molde
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