Esta torta de cebollas rojas es fácil de preparar, y difícil que a alguien no le guste. Su elaboración se parece un poco a la de la tortilla de patatas, aunque ésta no lleva huevo. Así que se trata de una opción perfecta para toda la familia, o si tienes invitados en casa, ya que, al ser sencilla de elaborar, la puedes hacer con poca antelación, antes de que lleguen tus invitados. Y ya verás, triunfaréis todos, porque está bien rica y es una receta poco conocida.
Pasos para elaborar la torta de cebollas rojas:
Paso 1: Disponer en un cazo el aceite con las patatas lavadas y bien secas para que no salte el aceite. Cocinarlas a fuego medio para no freírlas. A medida que se vayan haciendo, pinchar con la punta de un cuchillo para comprobar la cocción.
Paso 2: Cuando empiecen a estar blandas, retirarlas y pelarlas con una cuchara y ayudándote de un trapo, para no quemarte los dedos. Con un rallador, hacer pequeños montoncitos de patata sobre la tabla, rayándola por la parte más ancha.
Paso 3: En un cazo de bordes altos y con un chorrito de aceite de oliva, agregar el ajo hasta que tome color. Retirarlo. Agregar las cebollas cortadas muy finas y el vaso de vino tinto. Dejar que se pochen hasta que queden bien blandas. En el último momento, añadir la miel.
Paso 4: Forrar la superficie de una sartén antiadherente con las patatas ralladas. En el centro, colocar la cebolla, dejándola a 1 centímetro de los bordes, y cubrirla con más patata rallada. Arrimar la sartén a un fuego medio y, como si de una tortilla se tratara, cocinarla hasta que esté bien dorada.
Paso 5: Dar la vuelta a la tortilla y cocinar la otra cara.
Paso 6: Para la presentación, en un plato, disponer la torta con una mezcla de hojas de ensalada o unos cogollos aliñados con un chorrito de aceite de oliva mezclado con miel.